jueves, 26 de septiembre de 2013

Pura Vida

PURA VIDA: 
IÑAKI OCHOA DE OLZA

Hace un par de días, buceando por blogs de montaña me encontré un enlace en Reto Vertical, un blog que os aconsejo visitar. El enlace me llevaba a la página de TVE y a un documental llamado PURA VIDA que recupera el intento de rescate de Iñaki Ochoa en el Annapurna, en el año 2008.

Seguramente muchos lo hayáis visto. Yo no lo recordaba.

En poco más de 55 minutos se resumen perfectamente muchos de los valores de la gente que camina por las montañas. Amistad, compañerismo, sacrifico, honradez....

Tan sólo quería compartir el documental con aquellos de vosotros que, como yo, no lo hayáis visto. 

Enlace:PURA VIDA

Equipo de rescate. 
Fuente: www:soshimalaya.org

lunes, 23 de septiembre de 2013

Caminando por la Comunidad Valenciana: Montgó


TRAIL RUNNING:
MONTGÓ.


El Montgó, desde la autopista, con su habitual sombrero de nubes.

Vídeo de la ruta
Track de la ruta


Lo que últimamente viene siendo habitual, volvió a ocurrir. No pude subir por Broto. Con todo programado para pasarme por los Astazus, cambio de planes de ultimísima hora. ¡Qué racha!

El domingo nos vamos de comida a Jávea, con los amigos de Mª José, que tampoco está mal y veo una buena oportunidad para correr un poco. Antes de comer, correré por el Montgó, una montaña de 752 mts entre Denia y Jávea, en el Cabo de San Antonio y que es uno de los Parques Naturales más interesantes que tenemos en la Comunidad Valenciana. Hace años realicé parte de mi Tesis de Licenciatura por esta zona y pude describir una nueva especie de avispa para la ciencia: Barichneumon montgator...., pero eso es historia antigua. ¡Parezco el abuelo cebolleta!.

Esta montaña tiene una orientación casi este-oeste y digamos que está justo encima del cabo de San Antonio lo que permite tener unas fantásticas vistas del mar, a derecha e izquierda o al norte y al sur, mientras lo vas ascendiendo. A la derecha o norte está Denia y a la izquierda o sur está Jávea. Cuando haces cumbre, enfrente tuyo el Cabo de San Antonio con su faro y más allá, en días claros, Ibiza.

El domingo a media mañana estoy en Jesús Pobre desde donde comienza el ascenso al Montgó por su parte oeste.

La primera parte del camino está señalizado y no hay pérdida. Más arriba las cosas cambian un poco y hay que ir con cuidado de no salirse de la senda.




Comienzo por un tramo de asfalto que pronto se convierte en un camino empedrado de fuerte pendiente en algunos puntos. Los cuadriceps empiezan a calentarse. Menos mal que subo con nubes y en sombra.



Tras el primer kilómetro aparece la senda que no dejé hasta la cumbre. En esta primera parte se alternan tramos de mucha piedra con tramos trotones pero en general se corre bien. En los tramos llanos se disfruta, la vegetación es baja y permite buenas vistas.



Al cabo de un par de kilómetros, la pendiente se suaviza. Estamos en el lomo del Montgó, pero todavía lejos de la cumbre. La perspectiva engaña. La cumbre no estaba cerca y las rampas volverían para hacerme sudar bien.

A nuestra izquierda y más alta dejamos la Cruz del Montgó a 694 mts.



Hay un punto en el camino en el que la senda deja de ser cómoda y se vuelve muy desagradable. No se puede correr bien. Las rocas aparecen en medio de la senda, con filos muy cortantes, agujeros.... -el año pasado rajé unas zapatillas corriendo por aquí-. Es una zona de paciencia y de caminar ligero, con precaución y mil ojos


En un poco menos de una hora estoy arriba. Han sido 6 Km. Un poco lento.



La cima está llena de gente. Es un buen día para caminar. Las vistas son extraordinarias. El cabo de San Antonio, enfrente, es mi próximo destino.


El Peñón de Ifach en Calpe, al Sur, destaca sobre todo lo demás.


Una barrita de "Huesitos", que por cierto me cayó fatal, un trago de agua y para abajo. Seguiré la PR-CV 355 hasta el final del recorrido.

El descenso es un desafío para los tobillos. La primera parte, cresteando, es sencilla y bonita, el resto de la senda hasta la base, es un mar de piedras que hay que aguantar como se pueda. Lo mejor del descenso son las fabulosas vistas que tengo.



Una vista atrás de lo descendido.


Ahora toca llanear. Primero por pista y luego un tramo de carretera. El sol empieza a caer de plano y ya sudo a lo grande. Ni gorra ni nada. Estoy sufriendo con el calor. Pero voy a buen ritmo 4:50 de media es lo que me marca el reloj.


A medida que me alejo, la perspectiva del Montgo mejora y se ve en toda su potencia.


La pista se convierte en carretera. La PR va por la misma carretera y no tengo ganas de buscar alternativa por los caminos del bosque que lo bordea. Así que me trago el asfalto de la carretera en dirección Cabo de San Antonio .



Doscientos metros antes de alcanzar el faro aparece la señal que me desvía a la derecha, en descenso pronunciado, y que me mete en la senda que me llevará hasta el puerto deportivo de Jávea.




Llego justo de agua, con una sed de campeonato y pensando en la cerveza que me voy a tomar.

Final del trayecto. Casi dos horas. No es una gran marca ni mucho menos. No he sabido hacerlo mejor y al final he pasado mucho calor. Sin excusas. Flojito.


Mª José me espera junto a una escollera, mirando el mar en plan "La Sirenita". Aunque no lo reconozca, es más de mar que un boquerón. La montaña le encanta y la disfruta como nadie, pero en el mar ...


Malas noticias. Me he retrasado más de la cuenta y nos esperan para comer. Ni cerveza ni estiramientos. Al coche.

Al llegar la comida no está preparada y me puedo duchar... y de paso me tomo un par de cervezas mirando el mar. A mi derecha el cabo de San Antonio de donde vengo y a mi izquierda el cabo San Martín. La playa de piedra casi vacía, un lujo.



Y por fin la comida. Una paella de carne por cortesía de chef Miguel y otra de marisco por la gracia de chef Merlín. Di buena cuenta de ambas....., repitiendo. Muy ricas.




Y después de una buena tarde de charla y descanso, a casita que mañana es día de trabajo.

De vuelta pasamos junto al Montgó que se va tiñendo de naranja.


lunes, 2 de septiembre de 2013

Taillón, Casco de Marboré y Torre de Marboré

CASCO DE MARBORÉ (3.006 mts),
TORRE DE MARBORÉ (3.009 mts) 
Y DE REGALO 
TAILLON (3.144 mts).



Un cambio de planes inesperado. Mi previsión inicial era dirigirme al Casco de Marboré y Torre de Marboré, desde Cuello Gordo, pero corriendo; lo que ahora llamamos los modernos trail running. 

Pero en esto, Mª José me propone venirse conmigo y llegar hasta donde pueda. LLeva un año parada por culpa de una lesión y me dice que, en dos jornadas y por Sarradets, me acompaña. Se atreve con el Taillon.

Yo no lo tengo claro. Desde Bujaruelo (1.338 mts) hasta el Taillon (3.144 mts) son 1.800 metros de desnivel positivo y, lo peor...., luego hay que bajarlos. Y además está en "síndrome del primer día"; por algún motivo, el primer día se funde inesperadamente. El segundo día va como un tiro...., pero el primero... 

La cuestión es que me apetece mucho subir con ella. Hace tiempo que no vamos juntos en este plan...., total, que para arriba y hasta donde podamos. a disfrutar juntos y que salga el sol por donde quiera.

Salimos de Bujaruelo tarde, no hay prisa. Hace fresco y no pega el sol. Vamos al ritmo que marca Mª José que es ligero. No hay pérdida, la senda está perfectamente marcada. 

Hay mucha gente que sube y yo me empiezo a agobiar. Soy un solitario empedernido para estas cosas...., vamos, que soy rarito. Poco a poco los vamos pasando y subimos casi solos.




Atrás vamos dejando Bujaruelo, el valle de Otal o la subida al lago de Bernatuara que tengo pendiente este año.



Nuestro primer hito es el puerto de Bujaruelo (2.273 mts) que cada vez nos queda más cerca. Mª José va bien. Buena señal.


En un poco más de dos horas estamos en el puerto. Francia enfrente nuestro. Foto a la Muga 319 y continuamos camino. Al refugio de Sarradets (2.587 mts).
La senda sale a mano derecha tal y como llegamos. Cambio de señalética.




Llaneamos durante un rato por un paisaje desértico, con la cara Norte del taillon a nuestra derecha y el Col de Tentes a lo lejos, a nuestra izquierda.  Vamos buscando el amplio barranco que nos llevará hasta el refugio.


Llegados a este punto, giramos a la derecha y encaramos una pendiente que poco a poco nos permite ir descubriendo la otra cara del Taillon y algunos insignes monumentos como el Dedo....



Y es aquí donde Mª José pincha. Llegó el "síndrome del primer día". Ya hemos pasado por esto. Es cuestión de relajarse. Poco a poco. Ella tiene más ovarios que yo....., resistencia. Vamos a llegar seguro, pero más despacio. Y llegamos. Un poco menos de 4 horas. ¡Fantástico!



Paramos en el refugio, dejamos el carnet y comemos un poco. Mª José está tocada. Pero, después de un caldo y una tortilla, como por arte de magia, dice:

-Para arriba, vamos al Taillon antes de que me arrepienta.

Cogemos algo para picar, agua y sin pensarlo empezamos a subir....., ¡y como subimos!...., va como un cohete. ¡Qué tía! Vamos tan rápido que ni disparo una foto a la Brecha. Al llegar a ella tiro una, por dejar constancia.


Llegamos a la Brecha, giramos a la derecha y vamos ganando altura flanqueando la Punta Bazillac. El Dedo nos espera y obliga a pasarlo, cambiando a la vertiente francesa. Allí, una placa al lado de una cueva, nos recuerda que murió un joven por la caída de un rayo -hay un debate muy interesante en algunos lugares sobre si estas placas se mantienen o se quitan...., yo me mantengo al margen de polémicas-.





Ya tiene el Taillon a tiro. Esta contenta y se le nota. No para, sólo se va girando de vez en cuando para disfrutar de lo que se ve a nuestras espaldas. Todo el macizo de Monte Perdido, desde los Astazus...., ahí es nada.




Y cima. Hace cima como una rosa y yo me trago mis dudas. La foto de la cima es suya que se la merece...., y con el Vignemale de fondo.


Yo también quiero salir, pero con ella, que es la "prota".


Disfrutamos del paisaje, ella disfruta de su día, de las vistas. Si, está contenta. Cuando decide que bajemos, pues bajamos.



Y baja como una gacela. Yo alucino. No le duele nada. Impresionante. En un momento estamos otra vez en la Brecha. Y esta vez si que paramos. Quiero ver como está lo que recorreré mañana.



Ya en el refugio, la cerveza de la victoria...., bueno, la cervezas, que iba desaforada.


Cenamos...., cena francesa de bote. Bueno, con hambre todo está rico, pero no era para tirar cohetes. 

Me dice que no quiere forzar y que mañana se queda en el refugio. El Casco y la Torre para otra ocasión. Que todo para mí solito. Creo que hace bien. Es mejor ir poco a poco.

A las 9:30 a la cama y a las 6 arriba. Desayuno francés justito y a caminar. En el refugio me dicen que hacen falta crampones, así que me los hecho.

La mañana amanece muy clara y fresca. Comienzo a caminar con buen ritmo. A mi izquierda, el Casco y la Torre. Desde aquí, parecen inexpugnables.


Detrás de mi, el valle está cubierto de nubes y es una gozada mirar de vez en cuando.




Pronto alcanzo la Brecha y comienzo a perder altura para llegar hasta el paso de los Sarrios.



Una mirada atrás....


... y seguimos avanzando bajo las faldas del Casco, ganado altura, en dirección al Collado de los Sarrios.


Delante de mí van varios grupos. Hacen cosas muy raras. Entran en un nevero en dirección a la Torre para luego girar hacia el Casco. Uno tras otro, repiten la misma maniobra. 

Yo giro directamente a mi izquierda y siguiendo los hitos, voy ascendiendo. Miro atrás y veo que 3 de ellos han abandonado y siguen mis pasos.



La senda te lleva a la cresta de la izquierda. Allí, la pared se empina un poco más pero se va muy bien. No hay pasos difíciles ni aéreos. Ya casi estamos.


En unos minutos hago cima y estoy sólo. Corre un poco de viento y hace fresco.Pero las vistas son una gozada. 





Autofoto sin bandera, agua, galleta y a disfrutar. Cuando llegan los tres montañeros que me seguían, yo comienzo a bajar. A la Torre.


El descenso es rápido y me planto junto al corredor SO que da acceso directo a la Torre en un momento. Tiene nieve dura y son rampas de 45º-50º. Paso de corredor y voy por la vía normal, más larga pero más segura.

La ruta normal pasa por una faja, junto al corredor, y rodea la cima. En un momento, siguiendo los hitos, se enfrenta una pared que se gana poco a poco siempre en dirección este.






Una vez superada la pared se entra en una mar de roca rota que te lleva a la cima en pocos minutos.



Y segunda cima de la mañana. Solo otra vez.



Las vistas son espectaculares. 




Aquí si que me quedo un buen rato. No viene nadie. Que gozada...

Con pocas ganas vuelvo hacia Sarradets donde me espera Mª José. Voy deshaciendo el camino, ahora sí, disfrutando mucho más de todo lo que he ido recorriendo.




Y en Sarradets, antes de marchar para Bujaruelo....., la cerveza de la victoria.


Comemos un poco y hacemos camino con tranquilidad. 




Mª José con agujetas, pero contenta, se marca un tiempazo para ella. Justo, justo, justo, 3 horas hasta el coche. ¡De fábula!

Vuelve el equipo Cuarentatresmiles.....